La Circunscripción Nº 3 del Estado
Carabobo está conformada por las parroquias del centro y el norte de Valencia y los municipios Naguanagua y San Diego.
Para tener idea de la correlación político-electoral que se ha establecido en este circuito nos basta recordar los resultados obtenidos en el referendo aprobatorio de la Enmienda Constitucional, realizado el 15 de febrero de 2009. Estos son:
|
Parroquia/Municipio |
Chavismo |
% |
Oposición |
% |
|
Candelaria/Valencia |
8.078 |
46,25 |
9.386 |
53,74 |
|
San Blas/Valencia |
5.383 |
35,67 |
9.707 |
64,32 |
|
Catedral/Valencia |
1.152 |
41,57 |
1.619 |
58,42 |
|
El Socorro/Valencia |
1.150 |
31,90 |
2.455 |
68,09 |
|
San José/Valencia |
10.244 |
13,21 |
67.298 |
86,78 |
|
Naguanagua |
28.333 |
40,76 |
41.172 |
59,23 |
|
San Diego |
11.810 |
29,79 |
27.826 |
70,20 |
|
Totales |
66.150 |
29,32 |
159.463 |
70,67 |
De esas cifras y de su comparación con las resultantes en los demás circuitos de Carabobo se infiere que, en principio, la única circunscripción que podría ganar la oposición el próximo 26-S sería esta, la Nº 3.
Para que la revolución triunfe aquí se requeriría que se verificaran varias circunstancias, cuya concurrencia nos parece, en principio (repito), poco probable.
Ante este escenario decidimos postularnos para esta circunscripción en las internas del PSUV, entendiendo que nuestro deber consiste en aportar a la unidad partidista el poco o mucho trabajo social que hemos desarrollado durante estos años de revolución. Nunca hemos pensado en competir y, menos, en ganar, sólo en contribuir.
A partir del mismo domingo se iniciará una nueva fase de la lucha que debe orientarse colectivamente a recuperar espacios perdidos difundiendo las verdades socialistas. Allí estaremos, apoyando a quien haya sido seleccionado o seleccionada por nuestras bases.
Nota aparte les comento que, además de conversar con los compañeros de siempre y de asistir a reuniones convocadas en el marco de este proceso interno, lo único que hicimos fue instalar un sistema, casi gratuito, de mensajería a teléfonos móviles con el aporte de 26 amigos, algunos de ellos conocedores de software y esas cosas informáticas.
En el mensaje que hemos difundido invitamos a la participación e indicamos nuestro nombre y número en la boleta. Las respuestas que obtuvimos fueron diversas: unas solidarias, otras cuestionadoras u ofensivas (más que todo por el apellido que me dio el viejo socialista Manuel Feo La Cruz, fallecido en 1966 a pocos meses de mi nacimiento) y otras que son las que quiero resaltar. ¿Cómo puede entenderse que militantes del PSUV respondan de esta manera?:
“Les agradezco no me pasen más mensajes porque no comparto su ideología”.
“Ustedes son unos comunistas de mierda, quieren convertir a Venezuela en otra Cuba, ¿porqué no en otra Canadá?”.
“Olvídate de eso, aquí en Naguanagua voy a ganar con la oposición”.
Concluimos, entonces, en que resulta indispensable profundizar en la organización de la militancia del partido e incorporar cuadros a los distintos niveles de dirección y asignarles responsabilidades. Será la única manera de alcanzar la verdadera cohesión de las bases socialistas que cada día se hace más indispensable.
