Mil perdones camarada Farruco, por plagiarle el título de su libro y colocárselo a esta columna, la verdad que no encontré otro más adecuado, espero mi camarada Ministro me entienda, mil gracias. Si antes era Chavista, ahora tengo todas las razones para seguir siéndolo, no es rendirle culto al hombre, es a la idea personalizada en su acción y que durante dieciocho (18) años, desde aquel 04 de febrero, ha sido un líder comprometido con un pueblo en todos sus requerimientos, nada ha dejado al azar y ha tenido el coraje para responsabilizarce de cada una de sus acciones, incluyendo la de aquel episodio de febrero como las de hoy como jefe del gobierno. En Venezuela, no tenemos conocimientos de acciones similares, sólo las encontramos en las gestas libertadoras de un pueblo campesino y aborigen con Simón a la cabeza y algunos otros héroes y heroínas, entonces, desde aquella época, no había nacido un hombre del tamaño del compromiso que hacía falta al pueblo venezolano y a la América-Latina en su conjunto. La Espada de Bolívar recorre el Continente. Hoy, cuando la Patria vive uno de sus momentos más difíciles, enfrentando las adversidades del cambio climático, producto de un devastador trato con el Planeta por parte de los países “desarrollados”, su imagen de hombre y soldado, se agiganta junto a su pueblo, a igual como lo hizo en aquel deslave del 1999, hoy vuelve a ponerse al frente, adentrándose en sus necesidades y precarias formas de vida. Es justo también, rendir honores a hombres y mujeres que se la han jugado todas y más, por solventar las adversidades y rodilla en el lodo y las aguas hasta el pecho, han estado junto a los más humildes y también de los otros sectores de la sociedad, contribuyendo a solventar las inclemencias del tiempo. Dar a conocer nombres, sería un error, sería injusto omitir a alguien, ha sido un pueblo movilizado por su espíritu solidario, que se volcó por sus semejantes para tenderle la mano. Que orgullo siento de ser venezolano, quizás aportando muy poco o casi nada, pero ver a mis compatriotas movilizados por todos los rincones de la patria, me hace sentir ese sentimiento de amar más y más a mi pueblo bolivariano y revolucionario. Es posible que al pasar y vencer esta nueva prueba que nos ha colocado el destino, aparezcan muchas vivencias y anécdotas, que serán cultivo para quienes escriban esta otra parte de la historia vivida por nuestras mujeres y hombres que pusieron a prueba sus conocimientos y toda su solidaridad por nuestros hermanas y hermanos.
Vaya para todas y todos, la gratitud de este escribidor de cosas simples de la vida y sus circunstancias.
¡Viva mi Pueblo Valiente y Solidario!
¡Feliz Navidad y un año 2011 preñado de Socialismo!
Pedro Marillán Sánchez
Comunicador Social Comunitario
Caracas, 14 de de diciembre del año 2010
Año BICENTENARIO
