
En el dìa de ayer, las fuertes y constantes lluvìas que cayeron sobre el terrritorio de la Parroquia Bolivariana de Miguel Peña, en horas de el mediodìa, hasta las primeras horas de la noche y en vista que todavìa no sale por la tuberìa el vital e impresimdible lìquido, comenzaron a sacar los tobos para llenarlos de la lluvìa divina y solventar el problema del agua. Muchos comenzaron a buscar donde habìa un chorro de agua, colocar el tobo y de èsta manera poder limpiar los baños casi colapzados o limpiar los pisos de las casas. Otros optaron por bañarse durante la lluvìa. Muchas damas sacaron las matas, para que recibieran agua y mantenerse verdes, saludables, como lo manda la naturaleza.
Asì los habitantes de èsta populosa Parroquia, solventa y enfrenta los problemas momentaneamente.
El sacrifio humano sale a relucir, lo mismo es el socialismo que se demuestra a la hora de mantenerse unido entre los vecinos, para contribuir y solventar los situaciones.