Estoy convencida, por los últimos acontecimientos, que alrededor del líder, se teje una gran conspiración de características similares a la que padecimos en abril 2002, con la diferencia mas peligrosa aún para nosotros que ésta es más sofisticada, analicemos algunos aspectos: En 2001, por iniciativa de el diputado Luis Tascón, se le hizo entrega a Adán Chávez, para entonces dirigente nacional del MVR, de un documento contentivo de la Ley para el Servicio Eléctrico, la entrega la hizo quien suscribe, ese hecho de manera inexplicable, aunado a algunos comentarios del Ingeniero Eléctrico Tascón (es decir, alguien que sabe de la materia), produjo una sarta de intrigas que llevaron a esta columnista (a lo que yo denominé la Santa Inquisición), a una reunión en Miraflores a la que fui convocada para explicar mi posición en contra del pretendido intento de Luis Miquilena y sus secuaces en la conformación de una comisión de la AN a la que me opuse vehementemente, cuyo propósito era evaluar y poner freno a las 49 leyes habilitantes, pero de manera insólita, también se me reclamó por opiniones emitidas por los compatriotas Tascón y Pedro Carreño, ya que con Pedro, había hecho firme oposición no solo a la pretendida comisión para evaluar las leyes habilitantes, sino a la incorporación del mismísimo Alberto Arteaga (defensor histórico del Crápula Carlos Andrés Pérez), como asesor de la Camisón Especial para la redacción del Nuevo Código Penal.
Años mas tarde, se realiza un Aló Presidente en La Vueltosa, donde se muestra al país el adelanto en la obra civil del complejo hidroeléctrico y además se anuncia toda la inversión que piensa hacerse, pero como fue denunciado en 2008, la obra fue paralizada y nadie respondió por ello y es allí donde quiero llegar y centrar mi análisis, pues no me parece mera casualidad que estemos atravesando la crisis del sector el eléctrico con y por todas las causas y razones que tengamos, es decir naturales, sociales, políticas, internacionales y nadie se haya detenido a relacionar las fallas y causas humanas en la misma, que contribuyen a profundizar la crisis y no en poca medida.
Creo y espero equivocarme, que los responsables humanos están pasando inadvertidos en esta historia, no puede ser que a la hora de determinar el grado de responsabilidad en algunos descalabros que hemos sufrido y que conllevan un costo político peligroso para el avance del proceso revolucionario, los denunciantes resultan sentados en el banquillo de los acusados, pues tal situación me convence aun mas que efectivamente están conspirando y como toda conspiración que se respete, la misma viene de las entrañas del proceso revolucionario.
Por eso afirmo que se teje un nuevo 2002, las coincidencias son muchas como para no percibirlas, llamo al pueblo a estar alerta, ojo avizor con la situación, “rodilla en tierra”, para defender nuestro proceso, de los enemigos externos y de la derecha endógena que le sirve a la contra, cerremos filas con nuestro Presidente y mantengamos en todos los espacios posibles el debate necesario para cerrarle el paso a quienes pretenden matar nuestros sueños y nuestra esperanza.
NO VOLVERÁN
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