(ACN- Thais Cardona).- Funcionarios adscritos a la brigada de robo del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), subdelegación Valencia, detectaron y desmantelaron una fábrica clandestina de armas de fuego que operaba en el municipio Valencia del estado Carabobo.
El comisario Gerardo Suárez; el jefe de la subdelegación Valencia, informó que luego de trabajo de inteligencia por varios casos de hurto que se habían producido en unos galpones aledaños, efectivos detectaron el funcionamiento de la armería dentro de este galpón, ubicado en la avenida Este- Oeste de la Zona Industrial Norte de Valencia que se encontraba bajo la fachada de alquiler y reparación de montacargas, así como también de tornería.
Como resultado de este procedimiento que se llevó a cabo cerca de las 3:00 de la tarde del pasado miércoles 27 de octubre, fueron incautadas 57 conchas de calibre 357, 230 conchas de balas calibres 762, 406 ojivas de plomo sin blindaje, 85 ojivas de plomo con blindaje, la maquina recargadora de cartuchos, 100 piezas elaboradas en material color negro disparador, 11 empuñaduras de diferentes marcas y colores, 3 aprovisionadores elaborados en metal , una pistola 9 milímetro marca zixawell, un cargador perteneciente a un fusil R15, una culata fija con cajas de los mecanismos de un fusil automático livianos fals 7.62, una pistola Olímpica , calibre 45 milímetro, dos chasis de pistola sin marca ni modelo calibre 9 milímetro, tres culatas para escopetas y 30 cajas de los mecanismos para la fabricación de los fusiles R15.
El jefe de la CICPC, subdelegación Valencia informó, que por este procedimiento fue detenido Standler Ernest, de 69 años de edad, de origen sueco pero con nacionalidad venezolana adquirida, quien es Ingeniero Mecánico y a la vez es profesional en materia de armamento, trascendió que en su país de origen trabajó en una empresa fabricante en armas de guerras .
El detenido manifestó que se encontraba asociado con un amigo de nombre “Souger”, quien falleció hace dos años debido a una enfermedad que padeció y era el encargado de traer las piezas a Standler Ernest, para que la ensamblara y posteriormente, éste se las entregaba los R15 al ciudadano fallecido para su distribución.
El comisario Suarez destacó, que algunas de las piezas eran traídas de los Estados Unidos y otras eran fabricadas por el sexagenario para armar fusiles R15 y fusiles automáticos livianos, denominados Fals.
Tras esta incautación, el CICPC se encuentra profundizando las investigaciones para determinar el destino de este armamento de alta potencia.